martes, 15 de junio de 2010

Con ellos.



Con ellos.

Otra oportunidad, Dios mío, dame,
de tener entre mis dedos los deditos
delicados de éstos, tus pequeñitos;
que en mi alma quiera oirlos, te suplico,
y al hablarles, tu sabiduría derrame.

Que yo ame el que corran a mis brazos,
mientras buscan de inmediato algún consuelo;
sea porque su avioncito no alza vuelo,
o todos sus soldaditos por el suelo,
se confunden entre trompos y payasos.

Que mis pasos, Dios amado, rumbo a casa,
no se atrazen por no verles sus caritas;
Que a las quejas, antes de buscar ¨varitas¨,
de rodillas te consulte, mientras quitas
la impetuosa ira que el humano abraza.

Que en la plaza, en los ríos o en las lomas,
impactados por lo que perciban, quieran
preguntar de lo que existe, lo que vieran,
que en respuesta mis palabras les hicieran
entender que tú Señor cuidado tomas.

Que en mis bromas yo no emplee la humillación;
Que perciba de sus ojos los destellos
de quien anhela atención, y que entre ellos,
tus consejos impartidos sean por sellos,
y el ejemplo de tu amor sea inspiración.

Que la acción vean tanto como las promesas;
que concluya a su lado la canción;
Que vuelva a repetirles la porción
de la historia de tu Celestial mansión,
y de cuando Cristo vino, y sus proezas.

Que las mesas de juguete les ajuste;
Que les muestre cómo brillar las ventanas.
Que les lleve a respetar siempre, las canas,
con mi ejemplo, y que desde horas tempranas
vivir llenos de tu Espíritu les guste.

Que no frustre los deseos de mostrarme
sus dibujos, con sus detalles diversos.
Que me hallen, y no sólo a un par de pesos;
Que en afán inoportuno no dé besos,
y sin prisa, sepa con ellos sentarme.

Que al postrarme ante ti, Señor y Cristo,
porque han visto mi fe, sus pies atraiga;
que mi rostro humildemente al suelo caiga,
mientras tu presencia nuestro ser arraiga
y comprendan ellos que por ti yo existo.

Que esté listo a corregir la necedad
con justicia, y el enojo no domine;
ni consienta al infractor, y determine
que el fin de la corrección les encamine
al amor que se complace en la verdad.

No es la edad, ni son estos momentos quietos;
es tu Espíritu con sus toques divinos,
quien me enseña de tus profundos caminos;
quien revela mis continuos desatinos;
quien me muestra tu socorro en mis aprietos.

Ahora quieto sé: No aproveché los retos
de alumbrar cuando la sombra sobrevino;
y hoy en súplica, ante ti, Señor me inclino,
pues sí quiero ser lumbrera en el camino,
sino es tarde, aunque sea entre mis nietos.

M. Erskine Rivera
COPYRIGHT 1997/2009 M. Erskine


Foto "Mother And Baby" cortesía de Anna Cervova.

12 Comentaron...¿te animas? :

Anónimo dijo...

Ese es tambien mi anhelo, no sólo lo tiene usted, entiendo perfectamente su sentir y en llanto y oración a Dios suplico que ese momento llegue; creo que Dios cumple el dice en el Salmo 38(9) Señor delante de ti están todos mis deseos, y mi suspiro no te es oculto.

Los hijos vendrán...

Erskine dijo...

Este poema lo hice recreando una escena en la que un abuelo, concluye que no fue un buen padre con sus propios hijos; por eso al final de su oración a Dios, declara que quiere ser ejemplo, en una segunda oportunidad, aunque sea con sus nietos.

Saludos.

Anónimo dijo...

ok, si tiene razón despues que lo lei nuevamente sin interrupciones me di cuenta de eso, es hermoso, gracias

Dios lo siga bendiciendo.

Mariangie dijo...

Muy lindo como todos los poemas que he tenido la oportunidad de leer. Que Dios te siga dando inspiracion para que puedas llegar a mayor numero de personas. Cuidate mucho. TQM DTB

Erskine dijo...

Gracias Mariangie por el buen deseo.
Dios te bendiga de igual manera.

Anónimo dijo...

muy lindo poema. Dios le bendiga y felicidades.

Erskine dijo...

Gracias.

Anónimo dijo...

De nada, estamos para bendecir.

Anónimo dijo...

con el abuelo siete? na tres ;) ,,,(este escrito me puede,,,es hermoso).

Anónimo dijo...

!Hermoso hasta las lágrimas!

Cómo evitar ver los anhelos del poeta, si evidentemente en tan emotivo poema saltan a la vista?

Cómo evitar identificar mis propios anhelos, si al leerlos, pareciera estar leyendo uno de mis sueños?

Solo Dios sabe, como admiraría ver al que fuese el padre de mis hijos, en dichas vivencias y siendo ejemplo vivo de lo que Cristo ha hecho en él, sueño verlos de rodillas al lado de su padre e imaginando como nuestro Padre Celestial se deleitara en ese momento.

Dios te conceda el hermoso privilegio de hacer realidad tus anhelados deseos y de impartir en ellos,(tus hijos), lo que Cristo ha puesto en ti. De verdad fue muy bonito leer tus sentidas letras, gracias por eso, es un verdadero placer leerte.

Dios te acompañe y te guíe y la preciosa inpiración de Su Santo Espíritu, continúe en ti siempre. Bendiciones.

Erskine dijo...

Gracias por su paso, anónimo(a). Sea así, como declara en su bendición. Y sea así, como anhela en su corazón.

Anónimo dijo...

Amén, Así lo conceda mi Dios. Ese final le salió en verso. Gracias por la bendición declarada.